Durante una semana vamos a entrenar tu mente para que sea más brillante, para que pueda especializarse en nuevas habilidades y para que puedas usarla para conocerte mejor a vos misma/o.

 

Una vez al día elegí dos objetos iguales de tu vida cotidiana y encontrá la mayor cantidad de diferencias que puedas apreciar durante 30 segundos a un minuto. Tal vez a tu familia le guste participar del juego. Pueden ser dos tazas, dos vasos, dos pares de medias, dos cepillos de dientes, dos repasadores, etc.

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Cuando haya pasado la semana, volvé a hacer el juego con los dos primeros objetos de la lista y compará tu capacidad de observar diferencias entre este momento y 7 días atrás. 

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Poner al cerebro a diferenciar y apreciar variaciones es como darle de comer galletitas al monstruo de las galletitas o servirle Lemon Pie a Maria: ¡le encanta!