La verdad es bella
Este es un desafío que durará 9 días pero te llevará muy poco tiempo cada vez. ¿Estás lista?
¿Habías escuchado esta frase? Más allá de tus creencias religiosas, te invito a que encuentres un principio fundamental de la libertad: la libertad de conocer la verdad de tu valor intrínseco.
¡Allá vamos! Al irte a la cama hoy poné tu celular en un lugar distinto del que usás habitualmente para cargarlo mientras dormís. Tenés que completar la consigna del juego al despertar por las mañanas antes de agarrar el celular, así que te recomiendo que lleves tu diario de viaje o una hoja suelta y algo con qué escribir a la mesa de luz.
Mañana, cuando te despiertes y ANTES de mirar/encender/sacar de modo avión tu celular escribí en el margen superior de una hoja:
Lo que valoro de mí es ...
Al día siguiente, al despertar y SIN MIRAR EL CELULAR agregá en la hoja:
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Al día siguiente:
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
La próxima mañana, escribí y completá la frase 5 veces:
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Luego el quinto día deberás completar la frase 8 veces:
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
El sexto día del desafío serán 13 frases que deberás completar.
El séptimo día escribí 21 veces la frase, el octavo 34 veces y el último día 55. Sé que ahora te parece una lista muy larga. Pero ¡vamos! Solo tenés que dar el primer paso y cuando quieras darte cuenta estarás llegando a la meta. Tu lista del último día se verá de esta manera:
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
Lo que valoro de mí es ...
La VERDAD que te hace LIBRE es que tu sentido de valor intrínseco es lo que vos pensás y sentís acerca de vos mimsa, no lo que otros piensan o sienten respecto a vos. La aceptación o el rechazo de los demás no afecta tu valor. Tampoco puede afectarlo tus posesiones materiales, tus títulos y certificaciones, tus logros ni tus fracasos, ni las personas con las que te relacionas. Todas estas son cosas que pueden hacernos sentir mejor acerca de nosotros mismos de forma temporal y superficial, en situaciones específicas. Pero no determinan, y nunca podrán hacerlo, tu verdadero valor interno.